En esta ocasión vengo a presentar las dos primeras propuestas que diseñé para la nueva imagen corporativa de Vialis, y las razones por las cuales se desecharon completamente.
Primera propuesta para Vialis
Es curioso cómo algo que, en la cabeza, parece una magnífica idea se convierte en un arma de destrucción visual. Ahora veo esto y digo «pero madre mía, ¿en qué estaba pensando?». Sinceramente, no lo sé.
Quería una tipografía con gran peso visual. También me parecía acertada una combinación entre el negro y el amarillo o naranja. Y jugar con triángulos para formar la V. Pero para mezclar todos esos ingredientes parece que escogí la batidora más barata del chino de la esquina.
Segunda propuesta para Vialis
Había que romper por completo el logotipo actual, darle un aspecto totalmente renovado. Pero no, definitivamente esta no es la forma. Y ya no solo me parece horrible, sino que además se parece un montón a otro logotipo muy extendido, no tanto en tipografía o en composición, pero sí en cuanto a la idea. Por suerte, la descarté por completo.
La segunda propuesta ya era un poco mejor, más seria. La tipografía tenía un peso visual similar a la anterior pero los caracteres estaban más estilizados, aportándole al conjunto un aspecto con algo más de personalidad.
Al mismo tiempo jugaba con los triángulos para formar la V como contragrafismo y formar así el imagotipo. Sin embargo, era justamente aquí donde fallaba la composición, y es que también podría leerse una M en lugar de una V como pretendía, y esa ambigüedad es algo que no nos conviene en absoluto.
Por tanto, y como soy de la opinión de que se tarda menos haciendo las cosas desde cero que modificando lo que está abocado al fracaso, decidí descartarla y empezar de nuevo.
En mi siguiente entrada sobre Vialis colgaré mi propuesta definitiva.
Zeta Studios 